La misma se llevó a cabo en la sede de la unidad educativa, que se encuentra ubicada en la parroquia San José, municipio Tucupita, de la referida entidad y contó con la participación de servidores públicos del INIA, alumnos y profesores.
Se pudo conocer, que la actividad surgió por medio de la necesidad de participar en un proceso de autoproducción urbana, en donde la coordinación de vinculación social de la UNES bajo la responsabilidad de la Lcda. Mary León, solicitó el apoyo de la oficina de atención integral y desarrollo comunitario del ente agrícola, para romper con los viejos esquemas de dependencia alimentaria.
Preparación de las plántulas para el traslado
Es por ello, que se les brindó el acompañamiento técnico y profesional desde el área de Agricultura Familiar del INIA. Asimismo, durante el proceso de recuperación de los espacios improductivos del centro formativo, los participantes pudieron adquirir conocimientos y desarrollar sus habilidades y destrezas sobre los procesos productivos que busca el impulso sustentable en las comunidades.
La jornada inició con la inspección de los espacios de la UNES, seguidamente se efectuó un plan de siembra de acuerdo a los tipos de cultivos adaptados a las condiciones agroclimáticas de la región y se pudo visualizar que las parcelas a trabajar son de suelos fértiles por la presencia de abundante materia orgánica, es por ello, que se cultivó el ají dulce, como rubro prioritario.
Edward Mata, participante, comentó que, la creación de los huertos productivos incorporados al PNF policial de la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad, es tan importante ya que “nos permite crear una cultura productiva a través del apoyo técnico del INIA obteniendo los conocimientos necesarios para cultivar en nuestros espacios y obtener beneficios colectivos, y a su vez, ser multiplicadores del saber a próximas generaciones y aportar conciencia productiva al país”.
Por su parte, Manuel Trinitario, alumnos de la UNES y funcionario activo de la policía del estado Delta Amacuro, mencionó que, “el trasplante de estos ajíes en nuestra casa de estudios es importante porque se adquiere conocimientos y frutos saludables en poco tiempo, usando alternativas de manejo agronómico y se puede poner en práctica en nuestros hogares”.
Finalmente, a través de estos convenios interinstitucionales se da cumplimiento a una de las políticas del estado venezolano dando funcionamiento al motor agroalimentario, en función de establecer cultivos de ajíes dulces en espacios improductivos de la UNES e impulsar la activación de huertos orgánicos institucionales. (Fuente: David Alcocer. Fotografías: Maritza Figueroa. Redacción: María A. González B. 26-10-16).