Al respecto, Nohelia Rodríguez, Coordinadora de Fiscalización y Contraloría Social de la Gerencia de Participación y Desarrollo Comunitario del INIA, explicó que la actividad se llevó a cabo con el objetivo de intercambiar experiencias y conocimientos relacionados a la producción de semilla a través del uso de insumos biológicos en pro de minimizar la utilización de agroquímicos.
En la actividad se ampliaron conocimientos sobre la producción de semilla de caraota como estrategia de Soberanía Agroalimentaria, aspectos básicos de las casas de cultivo, manejo agronómico y manejo integrado de enfermedades e insectos plagas en la producción de semilla de caraota. En este sentido, Rodríguez destacó que las casas de cultivo representan una alternativa ventajosa para producir y obtener semillas genéticas de alta calidad. “Debido a la guerra económica inducida a la que nos estamos enfrentando, hemos aprovechado de manera eficaz esta ventaja, sembrando tres ciclos anuales para la producción de semilla, garantizando la pureza genética del material”. Las casas de cultivo se están utilizando para aumentar las líneas avanzadas del rubro caraota para posteriormente realizar los cruzamientos dirigidos en los Programas de Mejoramiento Genético, obteniendo así, materiales nuevos y mejorados. Asimismo la Coordinadora de Fiscalización detalló que se deben cumplir estrictamente las normas de producción de semilla para garantizar la calidad de las mismas. “Otra de las ventajas de las casas de cultivo es que se puede obtener mayor rendimiento en menor área, en este caso obtenemos 40 kg por casa de cultivo debido a que las condiciones de las mismas se prestan para que la planta de caraota tenga un hábito de crecimiento indeterminado y persiga una producción más alta. (Redacción: Daniela Candelo. Fotografías: Marisabel Solano).